La importancia de la educación y toma de conciencia sobre los cuidados del riñón

\"\"Para hablar sobre la importancia de seguir fortaleciendo la educación y conciencia sobre los cuidados del riñón, poniendo la vida de las personas con enfermedad renal en el corazón, invitamos al doctor Gustavo Aroca, Director de la Asociación Colombiana de Nefrología e Hipertensión Arterial (ASOCOLNEF), una asociación académica dedicada a promover la evolución y el desarrollo de la Nefrología en Colombia.

El Comité Directivo celebra el Día Mundial del Riñón, declarado en el 2021 como el año de “Salud renal para todos y en todas partes viviendo con enfermedad renal”, cada segundo jueves del mes de marzo, este día es organizado por la Sociedad Internacional de Nefrología y todas las asociaciones de Nefrologías del mundo, la Asociación Colombiana de Nefrología lo hace desde el año 2006, esta fecha memorable se creó con el fin de crear una campaña pertinente para hacer un llamado de prevención de la enfermedad renal a la población.

El objetivo de este Día Mundial del Riñón es informar y educar a las personas acerca de las enfermedades renales que presentan un alto crecimiento en Colombia. Esta campaña se viene llevando a cabo sobre todo con las etnias wayuu, arroja estos resultados y va dirigida a las comunidades con una encuesta de riesgo de enfermedad renal, la realización de exámenes de orina, exámenes de creatinina, sin ningún costo.

La importancia de esta campaña es resaltar, de acuerdo a las cifras oficiales que una de cada 10 personas padece enfermedad renal crónica, son casi 850 millones de habitantes en el mundo que presentan enfermedad renal. El riñón es un órgano vital y su función primordial es purificar la sangre y balancear las sustancias químicas del cuerpo y eliminar las toxinas, el riñón y sus nefronas, que son las estructuras, que filtran los desechos y los convierten en orina, permitiendo mantener una vida saludable.

Las principales recomendaciones para prevenir el desarrollo de enfermedades del riñón son:

– Disminuir el alto consumo del azúcar, acompañar las comidas preferiblemente con agua y no con jugos, ni gaseosas. Además, tratar de mantener una dieta baja en sal, evitando alimentos procesados.

-Tener una buena ingesta de líquidos, tomando 2 y medio litros de agua al día, especialmente en La Guajira, donde la población está expuesta a altas temperaturas y no se consume agua de manera adecuada, en muchas ocasiones las personas se hidratan con bebidas azucaradas, ocasionando daño al riñón.

-Tratar de no consumir medicamentos, sobre todo antiinflamatorios que dañan el riñón.

– Llevar una dieta balanceada, con alto consumo de frutas y verduras para prevenir la enfermedad renal y llevar un adecuado control de la presión arterial.

La otra recomendación es que las enfermedades renales no presentan síntomas y por lo regular cuando ya se acude al especialista del riñón, es decir, al nefrólogo, las personas llegan tarde a su tratamiento. Desde la Asociación Colombiana de Nefrología se aconseja hacer los exámenes preventivos, dentro de estos está el examen de la orina y el examen de la creatinina.

A las personas que ya tienen insuficiencia renal crónica, que están en diálisis o que han sido trasplantados la Asociación Colombiana de Nefrología hacen las siguientes recomendaciones para evitar el contagio y medidas de prevención ante la infección de la enfermedad COVID-19:

– Los pacientes con insuficiencia renal, en muchas ocasiones que dependen de diálisis no pueden cumplir las cuarentenas y los aislamientos obligatorios, de tal manera que ellos tienen que ir a sus terapias de reemplazo renal, tres veces por semana.

– Tratar en lo posible de no utilizar transporte público para ir a la sesión de diálisis.

– Mantener medidas de bioseguridad dentro de la misma casa, evitar las visitas de personas que normalmente están en la calle y tener todas las medidas de prevención como son un adecuado lavado de manos, el uso del tapabocas y los elementos de protección personal, estrategia clave para evitar que el virus se propague.

Los pacientes tienen que ser muy educados, de tal manera que las estrategias de prevención y síntomas de la enfermedad hay que comunicarlas tanto a ellos como a su familia.

– Dentro de las unidades renales, las recomendaciones son, además de usar los elementos de protección personal, tratar de mantener distancia entre las personas mayores a 2 metros, que permitan que el virus no sé propague.

Las personas con enfermedad renal deban tener una tamización, es decir, identificar personas que estén dentro de las unidades renales que pudieran ser sospechosas y hacer los aislamientos. Cuando la persona llegaa la unidad renal se hace un TRIAGE, es decir, un sistema de clasificación con toma de temperatura antes de ingreso a la unidad renal.

– Si alguna persona tiene sintomatología, debe ser aislada y realizarse de inmediato las pruebas, y en caso de que hubiese un contagio esta persona tiene que ser valorado de carácter urgente por el especialista.

– Restringir el contacto estrecho entre personas que hayan tenido COVID-19 con otros pacientes, se recomienda aislar de la Unidad de diálisis las personas que estén con contagio COVID-19 y evitar que circulen en la unidad renal.

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