
El control prenatal es la atención médica que recibe una mujer durante el embarazo para garantizar que tanto ella como su bebé estén en buen estado de salud. Asistir puntualmente a los controles permite detectar a tiempo cualquier complicación y recibir orientación para un embarazo seguro.
¿Por qué es importante?
Cada embarazo es diferente, por eso es fundamental contar con seguimiento profesional desde las primeras semanas. El control prenatal ayuda a:
- Detectar signos de alarma como presión alta, infecciones o anemia.
- Vigilar el crecimiento y desarrollo del bebé.
- Recibir orientación sobre nutrición, actividad física y preparación para el parto.
- Prevenir enfermedades que pueden afectar al recién nacido, como la sífilis congénita.
- Aplicar las vacunas necesarias durante la gestación.
¿Cuándo debes empezar?
Lo ideal es acudir al primer control apenas confirmes el embarazo. Durante toda la gestación, se deben realizar mínimo 6 controles distribuidos en los 9 meses. Cada cita cuenta, incluso si te sientes bien.
¿Qué pasa si no asistes?
La falta de controles aumenta el riesgo de complicaciones como parto prematuro, bajo peso al nacer o incluso la pérdida del bebé o de la madre. Por eso, cada control prenatal es una oportunidad para cuidar dos vidas.
Una cita a tiempo puede marcar la diferencia. No faltes a tus controles. Cuidarte es amar a tu bebé desde antes de nacer.