Durante el 13o Congreso Gestarsalud, la gerente de la EPSI Anas Wayuu, Beda Margarita Suárez, respondió con un “Sí, pero no así” ante la pregunta sobre la reforma, destacando la necesidad de diálogo para avanzar. Enfatizó que cualquier norma política que impacte a las comunidades indígenas debe incluir una consulta previa, un derecho legal fundamental.
Suárez hizo hincapié en reconocer las leyes y normativas que respaldan la participación de los pueblos indígenas en el sistema de seguridad social y salud. Asimismo, subrayó que los derechos constitucionales deben progresar, no retroceder, especialmente en lo que respecta a las instituciones propias de salud establecidas por los pueblos indígenas, con más de 27 años de experiencia en el departamento de la Guajira.
En este sentido, resaltó la importancia de reconocer las particularidades poblacionales, epidemiológicas y sociodemográficas al implementar modelos de prestación de servicios en zonas rurales dispersas. Además, destacó la necesidad de reconocer y recompensar adecuadamente la labor del recurso humano en salud, incluyendo incentivos tanto para el personal de salud como para los agentes tradicionales de salud presentes en el territorio.
Suárez enfatizó la necesidad de una intervención efectiva en los determinantes sociales, fortaleciendo así la noción de salud según la visión wayuu y promoviendo el concepto de “buen vivir”.
Finalmente, hizo un llamado al reconocimiento del gobierno propio de las autoridades tradicionales, expresando disposición para trabajar conjuntamente en caso de reformas, a fin de garantizar que la atención en los territorios respete realidades, condiciones dignas y apropiadas, así como creencias, usos, costumbres y sistemas normativos.
