En Colombia, se están experimentando cambios climáticos que resultan en temperaturas elevadas. Se presenta la aparición de incendios forestales en cerros y montañas del país. Un aspecto crucial a tener en cuenta, especialmente para nuestros niños, es el riesgo de golpe de calor debido a las altas temperaturas, que se produce cuando la temperatura supera los 32 grados centígrados.
Muchos niños disfrutan estar al aire libre jugando y compartiendo momentos, pero como padres, cuidadores y personal de la salud, es esencial seguir algunas recomendaciones para prevenir el golpe de calor, aunque no necesariamente al pie de la letra.
Es fundamental mantener a los niños bien hidratados mientras hacen ejercicio o juegan al aire libre, aplicar bloqueadores solares para proteger su piel de los dañinos rayos del sol, y vestirlos de manera adecuada para el clima, permitiéndoles realizar actividades físicas sin exponerse a las altas temperaturas.
En caso de que un niño presente síntomas como náuseas, vómitos, dolor de cabeza, irritabilidad, somnolencia, desmayos, mareos o visión borrosa, estos deben considerarse señales de un posible golpe de calor. Ante cualquier manifestación de estos síntomas, se recomienda llevar al niño a un servicio de urgencias de inmediato.
Es importante recordar que nos encontramos en una época de cambios climáticos, denominada época invernal, donde las fluctuaciones de temperatura pueden llevar a complicaciones de salud, especialmente en niños. Por lo tanto, es necesario tomar medidas preventivas para garantizar el bienestar de los más pequeños.