¡Mida su presión arterial con precisión, contrólela y viva más tiempo!

El Día Mundial de la Hipertensión Arterial destaca la importancia crucial de monitorear regularmente la presión arterial. Esta condición, conocida como el “asesino silencioso”, a menudo no presenta síntomas evidentes hasta que alcanza niveles peligrosamente altos, lo que puede provocar daños graves en diversos órganos del cuerpo.

La presión arterial elevada puede desencadenar problemas graves, especialmente en el sistema nervioso, como isquemias cerebrales y derrames, así como infartos y otras complicaciones cardiovasculares. Por ello, es fundamental realizar chequeos periódicos de la presión arterial.

La hipertensión arterial es prevenible y está estrechamente relacionada con factores externos, como una dieta rica en sodio y alimentos procesados. Estos hábitos alimenticios pueden influir significativamente en los niveles de presión arterial y, a su vez, aumentar el riesgo de daño orgánico.

Los riñones, por ejemplo, pueden sufrir daños como la albuminuria, que con el tiempo puede conducir a una insuficiencia renal crónica y, en casos extremos, requerir diálisis. Además, la hipertensión arterial no controlada puede afectar la vista, el corazón y el cerebro, aumentando el riesgo de diversas complicaciones graves, como infartos y accidentes cerebrovasculares.

La falta de tratamiento o control adecuado de la hipertensión arterial puede tener consecuencias devastadoras, desde insuficiencia renal terminal hasta discapacidad neurológica grave e incluso la muerte súbita. Por lo tanto, es fundamental tomar medidas preventivas y controlar activamente la presión arterial para una vida más larga y saludable.